18 de septiembre

¡Felices fiestas patrias a todos nosotros, chilenos de corazón, que están en el país o fuera de él!

Espero que si lejos están, hayan podido poner un CD, escuchar en su avanzado reproductor de mp3 o incluso un cassette por ahí perdido, de cueca o música chilena en general.

Espero que hayan podido recordar a Chile, y la nostalgia los traiga nuevamente a su tierra, o disfruten una rica empanada en el exterior.

Si están en Chile, disfruten de las entretenidas fondas, ricas comidas típicas, y otros... en este nuestro cumpleaños n° 199.

Recuerden que el próximo año es nuestro bicentenario, y tiraremos la casa por la ventana para celebrar que Chile es lo mejor de todo el mundo, tiene un fragmento de cada país, climas tan variados como granos de arena en las playas, una hermosa cordillera, y tantas cosas más.

Estoy orgullosa de ser chilena... ¡Viva chile mier...!

:) tiki tiki tiiiiii

Pendejadas de colegio

Ayer, asistí a el cumpleaños de una de mis amigas del colegio, y creí lo pasaría bien...sin mayores jugarretas de pelambre ni cuchicheos entre gente.

Pensé que la madurez había hecho efecto en sus cerebros, pero claramente me había equivocado.
¡Qué pena da! No podían estar 2 segundos sin mirarme y reírse o apuntarme con los ojos, para que especialmente me sintiera mal.
Pensé que lo que había pasado en el colegio, quedaba ahí, por favor somos grandes, crecimos...¿todavía tienen fuerzas para seguir carboneando? Me dan realmente pena.
Mujeres, podemos ser muy crueles cuando queremos...
:(

El perdón

¿Cuan dispuestos estamos a dar con tal de recibir?

¿Cuan dispuestos estamos a llorar con tal de reír?
¿Cuan dispuestos estamos a olvidar con tal de vivir nuevamente?
¿Cuan dispuestos estamos a trabajar con tal de soñar de nuevo?
¿Cuan dispuestos estamos a perdonar con tal de recibir un solo beso?
¿Cuan dispuestos estamos a equivocarnos con tal de aprender?

¿Podremos acaso perdonar, o eso debemos dejárselo a Dios? ¿Solo podremos disculpar?
De lo que estoy segura es que en ninguna de ambas, triunfa el olvido. Todo permanece intacto...solo que el polvo opaca un poco el esplendor del dolor, y crea la sensación de olvido. Pero apenas corra una brisa y se disperse el polvo, el brillo será exactamente igual al del comienzo. Pero ahora, sabremos mirarlo con otros ojos.

¡Luchemos por el aprendizaje diario que nos lleve a la madurez de nuestra constante infancia!